martes, 23 de marzo de 2010

Breve cronica de una desafiliacion

Domingo a la tarde, estamos cerca de la desafiliación, de 9 puntos en juego debemos sacar 7 si o si.

Entre a mitad de campeonato, soy el tercer tecnico de la temporada.

La hinchada me putea si juego 3-4-3, esquema que siemrpe amé.

El presidente me dijo que si no pongo linea de 4 me raja.

Preparo a reganiadientes un clasico 4-4-2, mejor dicho 4-3-1-2.

Pongo un pibe de enganche que no sabe ni que es ese puesto, no tengo otra cosa.

Los delanteros no tienen gol, pero es lo que hay.

Me toca con el puntero, nadie piensa que ganemos.

Le digo a los players que pongan huevos, nada de regalar pelotas.

A los defensores les dije que nada de lujos, a los del medio les pedi mucha marca.

Salen a la cancha, la hinchada nuestra son apenas 50 gatos locos.

Jugamos de visitante, peor marco imposible.

El refery toca el silbato: arranca el juego.

Nos matan a pelotazos, se ve el gol al caer.

Gol de ellos, mi defensa no marca a nadie.

Puteo mucho, a los 5 minutos otro gol de los rivales.

Termina el primer tiempo, estamos al horno.

Entramos al vestuario, grito.

"El que no quiere poner huevo me avisa y lo saco, no rompan mas las bolas"

Me miran enojados, salvo el pibe que agacha la cabeza.

Salen todos, el pibe se rezaga y le tiro una frase: "Pendejo si agarras una encara".

El pibe no contesta.

Arranca la segunda parte, nos siguen atacando con todo, pero ahora marcamos mejor.

Al fin llegamos un par de veces, pero con centros que rechazan los centrales.

Le queda un rebote al pibe, encara, se pasa a tres y golazo.

La hinchada se vuelve loca, el pibe me mira y sonrie.

"Vamos ahora carajo", grito.

El 9 de ellos pesca un rebote, patea y travesaño.

Casi me agarra un infarto.

5 minutos para el final.

No queda otra, mando a los centrales de 9.

Llueven los centros y sufro cada contra.

Quilombo en el area rival, muchos rebotes, queda la bocha boyando.

Arremete un central nuestro, patea con el alma: gol.

Minuto de descuento, mando a todos arriba.

Centro a la olla, cabezazo de un delantero nuestro, palo.

Puteo hasta en arameo.

Salen rapido en la contra, 4 contra 2.

La veo venir, no quiero mirar.

Tocan rapido y bien, el 9 de ellos queda mano a mano.

El arquero sale a cortar, el 9 intenta pasarlo.

Penal.

Roja para el arquero, no hay mas cambios para hacer.

Entra a atajar el 5 nuestro.

La acomoda el 10 de ellos, la estrella del campeonato.

Patea bien arriba, demasiado arriba.

Travesaño.

El rebote le queda increiblemente de nuevo al 10.

Patea a quemarropa, el arquero improvisado se estira.

Gol.

No lo puedo creer.

Sacamos y termina el partido.

Fuimos.

Con esta derrota quedamos desafiliados.

Miro vergonzosamente la hinchada, espero puteadas de todos los colores.

Increible.

La hinchada aplaude, reconoce que pusimos garra.

Los players lloran.

Me voy de la cancha, fue el ultimo partido que dirigi en ese equipo.

Yo no se que pasaba si el cabezazo en vez de palo hubiese sido gol.

Pero, en fin, asi es el futbol.

miércoles, 3 de marzo de 2010

¿Por qué te amo? Parte final

¿Te he amado lo suficiente como para que dejes de llorar?
¿Acaso que hayas tocado mi alma con sed de vos, no te basta?
Si ya no te hace feliz dar, entonces tomá lo que quieras.
Pero, no te hagas hombre aún.
Los hombres no están preparados para oírte.
Sus sonrisas te congelan porque no te entienden.
Mucho mejor sería que te conviertas en Sol.
Y que me abrases todas las tardes de invierno, hasta que te hundas en el ocaso.
No quiero verte sufrir.
Sé que aún no están preparados para tu llegada.
¿Cómo lo sé?
Pues, por tu bienaventurado modo de hacerlos pensar.
Los herís con tanta sinceridad.
En cambio a mí no me hiere tu franqueza, me siento cómoda con ella y la disfruto cual mariposa danza despreocupada en primavera.
Tus palabras me conmueven, me colman de nostalgia, pero no me perturban.
Sé que, aunque quisiera, no puedo seguir tus pasos.
No puedo irme, me gusta quedarme y saber que me voy con vos, todas las noches.
Ay! Cómo quise irme y dejar todo tantas veces! Y sin embargo, hay algo que me detiene.
Es esa horrible sensación que tantas veces visualicé en mis sueños.
Me quedo.
Y por que te amo renuncio a vos.
De esta renuncia he de hacerme más fuerte.
Mis lágrimas que solían saber amargo comienzan a tener un particular dulzor.
Pero, nadie vendrá a lamerlas una vez que caigan sobre mis manos.
Mi consuelo es observarte cuando reposás sobre una piedra en medio del arroyo.
Qué bien te sienta el recorrido del agua sobre tu espalda.
Qué buenos amantes hubiésemos podido ser!
Cuántas canciones de amor le hubiésemos dedicado a la noche!
Nuestros caminos se abren en este momento.
Ahora he de marcharme con la frente en alto y el corazón lleno de gozo.
Porque te encontré y me diste todo sin haberlo pedido.
Si haz de hallar la forma, y deseas que te sea recíproca de alguna manera,
sólo debés llamarme… aunque las máscaras cambien siempre voy a ser la misma para vos.